Colchón Recomendación de compra: cómo elegir el producto adecuado
- Lo más importante en breve
- Ya estén rellenos de muelles, espuma o látex, los colchones tienen un tacto diferente y se adaptan a distintos hábitos de sueño.
- El tamaño estándar de un colchón es de 140 x 200 cm, aunque hay diferentes tamaños para solteros, parejas y niños.
- En función de su peso corporal y sus preferencias, cada persona puede elegir la firmeza deseada para su colchón.
- Para dormir bien, se recomienda un colchón de 7 zonas con gran elasticidad puntual que favorezca un buen clima de descanso.
- Mantener el colchón en buen estado volteándolo, aireándolo y limpiándolo con regularidad puede prolongar su vida útil.
Como haces tu cama, así debes acostarte en ella
Has hecho tu cama, ahora duerme en ella. Se trata, por supuesto, de una metáfora para describir cómo todos somos responsables de las cosas que ocurren en nuestras vidas. La misma lógica puede aplicarse a la compra de un colchón de mala calidad. Como seres humanos, pasamos un tercio de nuestras vidas dormidos. Un sueño relajante es esencial para mantener el equilibrio emocional, la eficacia mental y la salud física. Normalmente, este tipo de descanso sólo es posible con la ayuda de uncolchón adecuado. Si su colchón es demasiado duro, demasiado frío o incluso demasiado ruidoso, las consecuencias pueden ir desde problemas para dormir hasta dolores de espalda.
La mayoría de la gente conserva un colchón durante diez años. Por eso es aún más importante elegir un buen modelo. Al fin y al cabo, el colchón más adecuado para usted dependerá de sus preferencias y hábitos personales. Sin embargo, elegir el colchón adecuado no siempre es fácil. En el siguiente texto, analizaremos qué es lo que hace que un colchón sea perfecto.
De sacos de paja a colchones de lujo
Los antecesores del colchón actual existen desde tiempos inmemoriales. En la antigua Grecia, los colchones solían rellenarse con lana o fibras naturales. Lo mismo ocurría con los antiguos romanos, que rellenaban sus colchones con cañas, paja o plumas. Durante mucho tiempo, los colchones tal y como los conocemos hoy en día sólo estaban al alcance de cierta clase de personas; la gente normal, en cambio, dormía sobre algo parecido a una alfombra en el suelo. No fue hasta finales del sigloXIX cuando los colchones se pusieron a disposición de las distintas clases sociales.
Fijar el presupuesto
Cada vez más proveedores de colchones recurren a la compra por Internet y a modernos anuncios en TV para dirigirse a un público más joven. Los colchones pueden ser artículos voluminosos, lo que los hace especialmente adecuados para el mercado en línea. Es mucho más fácil recibir un colchón en la puerta de casa que arrastrarlo en el coche, por no hablar del transporte público. Muchos vendedores en línea afirman que sus colchones ofrecen un alto nivel de confort, independientemente del tamaño, el peso y los hábitos de sueño del usuario.
No existe un colchón que sirva para todos. En cambio, hay una serie de criterios objetivos que todo buen colchón debe cumplir. Junto con la calidad del colchón, el precio desempeña un papel innegablemente importante. Dependiendo de su presupuesto, los colchones pueden ir desde el más sencillo de espuma subyacente hasta modelos de lujo.
En general, los colchones pueden clasificarse en cuatro categorías de precios:
- Barato: Los colchones que cuestan menos de 350 € pueden considerarse baratos. Su falta de calidad se traduce a menudo en grumos.
- Precio medio: Entre 350 y 500 euros suelen garantizar un colchón aceptable que se adapta a todos los hábitos de sueño.
- Caro: Los colchones de entre 500 y 700 € suelen ser cualitativamente superiores a los modelos más baratos.
- Muy caro: Por encima de 700 £ se encuentran modelos de colchón de lujo que a menudo se adaptan individualmente a los hábitos de sueño del cliente.
Tipos habituales de relleno de colchones
Las principales diferencias entre los distintos tipos de colchón radican en su diseño y sus materiales. Que el modelo utilice muelles, espuma o látex determina las propiedades del colchón.
Colchones de muelles: una opción robusta
Los colchones de muelles pueden ser de muelles Bonnell o de muelles ensacados. Lo que todos tienen en común son sus muelles interiores de acero que suben y bajan cuando se aplica presión. Los muelles están cubiertos por una capa protectora de fieltro o vellón que protege el acolchado de cualquier daño causado por los muelles. El acolchado también garantiza que el usuario no sienta ningún efecto incómodo de los muelles clavándose en su cuerpo.
Los muelles de acero se encargan de que los hombros y el cuello se hundan en el colchón mientras sujetan la columna vertebral. Los colchones de muelles se diferencian por su elasticidad, su aireación y el clima que proporcionan para dormir. Gracias a su diseño, el aire puede circular libremente por elcolchón. El resultado involuntario de esto es la pérdida potencial de calor, que puede ser un problema para las personas que pasan frío por la noche. Sin embargo, para quienes prefieren dormir en un ambiente fresco, esto puede ser una ventaja. La humedad no se acumula, por lo que el moho no suele ser un problema en los somieres. Del mismo modo, estos colchones pueden ayudar a reducir la sudoración durante la noche.
Los colchones con muelles son más pesados y menos flexibles que las alternativas. Sin embargo, son extremadamente robustos y tienen una larga vida útil. La estructura de acero de un colchón de muelles puede conservar su forma durante muchos años. Los modelos más baratos duran entre 5 y 8 años, mientras que los más caros pueden durar entre 10 y 14 años. Con el tiempo, los muelles de la cama pueden atravesar el acolchado y causar molestias. Esto ocurre sobre todo con los modelos más baratos. A algunos usuarios también les resulta especialmente molesto el chirrido ocasional de una cama de muelles.
Ventajas
- Larga vida útil
- Los modelos de calidad tienen un alto nivel de elasticidad
- Transferencia eficaz de la humedad
- Buena aireación
- Un entorno excepcional para dormir
Desventajas
- Los muelles pueden atravesar los modelos más baratos
- Comparativamente pesado
- Es posible que se produzcan chirridos
Colchones de muelles Bonell
Los colchones de muelles Bonell pertenecen al extremo más barato de la gama de precios y ofrecen una mejor relación calidad-precio. Los muelles se estrechan para parecerse a los relojes de arena y se mantienen unidos con un armazón de alambre, lo que los hace generalmente blandos, pero conservan la firmeza si se aplica presión en un punto concreto. Esto significa que, si se presiona, todo elcolchón cede. Los pequeños movimientos del trampolín hacia arriba y hacia abajo pueden resultar incómodos para algunos usuarios, mientras que para otros es algo que buscan explícitamente. Para fabricar una cama de muelles Bonell se necesita un número comparativamente menor de muelles que para un modelo de muelles ensacados. Esta es la razón por la que son relativamente ligeros.
Cama de muelles ensacados
Mientras que los muelles de un colchón de muelles normales están recubiertos de una superficie exterior de espuma, en los colchones de muelles ensacados las distintas filas de muelles también están recubiertas de un acolchado individual. Estas filas se pegan entre sí para formar toda la superficie del colchón. Esto permite que cada fila se amolde a la forma del cuerpo del usuario con mayor independencia de las demás.
Debido a su mayor elasticidad puntual, los colchones de muelles ensacados baratos y de precio medio son menos propensos a rebotar hacia arriba y hacia abajo que los colchones de muelles Bonell. Los modelos de mayor calidad pueden ofrecer un nivel de confort aún mayor. Sus muelles son ligeramente bulbosos y, como resultado, son extremadamente flexibles y sensibles. Gracias a su gran elasticidad localizada, este tipo de colchones se amoldan especialmente bien a la forma del cuerpo.
Colchón de látex: perfecto para alérgicos
Aunque antiguamente el látex se extraía de los árboles del caucho, en la actualidad se fabrica casi exclusivamente de forma sintética. Los colchones de látex suelen ser más caros, aunque la calidad depende en gran medida de los materiales que empleen. Los tres tipos principales son los siguientes:
- látex natural, con una proporción superior al 75% de caucho,
- una mezcla de látex natural y sintético en la que la proporción de caucho es inferior al 75%,
- y látex sintético.
En el mejor de los casos, un colchón de látex natural estaría fabricado íntegramente con látex natural. Sin embargo, es una opción mucho más cara, ya que los colchones de látex completamente natural cuestan hasta 200 libras más que las versiones sintéticas. La ventaja del látex natural reside en su transpirabilidad y su mayor elasticidad puntual. Los colchones de látex pueden pesar entre 14 y 30 kg, lo que los hace bastante más pesados que los colchones de espuma fría (11-18 kg).
Para los durmientes inquietos, un colchón de látex ofrece la ventaja particular de no emitir ruidos molestos. Los colchones de látex natural fabricados con caucho captan y almacenan el calor corporal mucho mejor que los colchones de muelles. Para quienes sufren de noches frías, pueden ser una excelente opción. Para quienes tienden a sudar, pueden ser muy poco útiles. Además, los colchones de látex son muy higiénicos. Esto se debe a su sistema de aireación, que impide la formación de bacterias que pueden provocar alergias. Al principio, los colchones de látex pueden desprender un ligero olor, pero éste debería disiparse con el tiempo.
Existen dos métodos principales de fabricación de colchones de látex: el método Dunlop y el método Talalay. Con el método Dunlop, el látex se lava primero con jabón y aire antes de vulcanizarlo. Este método atrapa pequeñas burbujas de aire en el material y le da su textura distintiva. Este tipo de colchón es muy transpirable y barato.
El método Talalay añade dos pasos adicionales al método Dunlop. Aquí, el látex se vierte en un molde y se introduce en un vacío, que extiende el material uniformemente sin atrapar aire en su interior. A continuación, la mezcla se congela rápidamente, antes de tratarla con dióxido de carbono y aire. El gel resultante se vulcaniza. El método Talalay requiere un importante gasto de energía, y su precio es correspondientemente más elevado. Las burbujas de aire dentro del material se distribuyen uniformemente, creando un colchón más blando y con mayor elasticidad puntual. Estos colchones son muy estables, tienen una larga vida útil y, gracias a su estructura celular, ofrecen una mejor circulación del aire.
Ventajas
- El látex natural no daña el medio ambiente
- Gran elasticidad puntual
- Larga vida útil
- Hipoalergénico
- No emite sonido
Desventajas
- Pesado e incómodo
- Ligero olor al comprarlo
- Caro
Colchones de espuma: la opción flexible
Los colchones de espuma convencionales siguen siendo la norma en la mayoría de las camas infantiles. Este tipo de espuma suele estar fabricada a partir de un único bloque de poliuretano con una distribución desigual de la firmeza que le ayuda a adaptarse a los contornos del cuerpo. Hasta la invención de la espuma fría, los colchones de espuma se consideraban una opción insostenible. Sin embargo, esto ya no es así.
Colchones de espuma fría
Los colchones de espuma fría suelen ser bastante baratos y, como su nombre indica, se fabrican con un método de producción en frío en el que el poliuretano se espuma y luego se fija en su forma, creando una firmeza más uniformemente distribuida que con otros tipos de colchón de espuma. La espuma fría es igualmente superior en elasticidad puntual y estabilidad, lo que la convierte en el material perfecto para un sueño reparador. A las personas que duermen inquietas también les conviene utilizar un colchón de espuma fría, ya que permite dar vueltas en la cama sin hacer ruido. Esto también puede ser beneficioso para las parejas que tienen una distribución desigual del peso en la cama.
Los colchones de espuma fría conservan el calor, por lo que son más adecuados para las personas que sudan menos. Un problema de los colchones de espuma fría es que, con el tiempo, pueden desarrollar problemas de compresión, en los que las zonas demasiado usadas se ablandan. Esto puede combatirse volteando regularmente el colchón. El olor que suelen desprender al comprarlos suele desaparecer tras un breve periodo de uso.
Ventajas
- Larga vida útil
- Se amolda al cuerpo del usuario
- No emite sonido al ejercer presión
- Barato de adquirir
Desventajas
- Buena circulación del aire
- Eventualmente susceptible de desgastarse
- Ligero olor químico al comprarlo
Colchones viscoelásticos
Del espacio al dormitorio: los colchones viscoelásticos de precio medio se fabrican con la llamada «espuma con memoria», desarrollada originalmente para los astronautas. La espuma con memoria es termosensible y se utilizaba para ajustar perfectamente los trajes espaciales al cuerpo de los astronautas. La espuma visco reacciona tanto a la presión como al calor, por lo que se amolda perfectamente al cuerpo. También es extremadamente elástico, aunque esto sólo se aprecia con retardo después de que se libere la presión de su superficie. Si se presiona la superficie con la mano, la huella permanece visible durante mucho tiempo. La espuma con memoria reacciona muy lentamente, lo que significa que es más adecuada para durmientes tranquilos. En cambio, los durmientes inquietos pueden sentirse frustrados por la lentitud de reacción del colchón, que puede limitar sus movimientos.
Las personas que pasan frío por la noche también se benefician de las propiedadesde aislamiento térmico de la espuma viscoelástica. A las personas que tienden a sudar se les recomendaría una cama de muelles, ya que la espuma viscoelástica puede volverse rancia si se expone a demasiada humedad. Debido a la gran elasticidad puntual de la espuma viscoelástica, a menudo se prescriben para problemas ortopédicos. Son especialmente útiles para las personas con problemas de espalda.
Ventajas
- Elasticidad puntual
- Elimina la presión de las partes sensibles del cuerpo
- No hace ruido
Desventajas
- El tipo de colchón más caro
- Puede volverse rancio
- Retraso en el retorno a la forma original una vez ejercida la presión
Otros tipos de colchones
Además de los tipos de colchón mencionados, existen otros más especializados:
- Cama de agua: Las camas de agua utilizan agua como relleno del colchón, normalmente conteniéndola dentro de una construcción estable.
- Cama Box Spring: El colchón no se asienta sobre un somier de láminas, sino sobre una base especial.
- Colchónde aire: Este tipo de colchón está fabricado con una membrana dividida en cámaras y rellena de aire.
- Colchónanti úlceras: Este tipo de colchón ayuda a ejercer menos presión sobre la piel de los pacientes que necesitan cuidados y tienen dificultades para moverse.
- Colchónnatural: En la fabricación de un colchón se pueden integrar materiales naturales como crin de caballo, paja, cáscaras de cereales, fibras de coco y algas marinas.
¿Cama infantil, estándar o king size?
Hay colchones de distintos tamaños para niños, parejas y solteros. El tamaño del cuerpo, el espacio en el dormitorio y los hábitos de sueño también influyen.
Para solteros y personas con poco espacio
La mayoría de los solteros con poco espacio en el dormitorio optan por una cama de 100 o 120 x 200 cm. Si va a recibir invitados, una anchura de 140 o 160 cm proporciona un espacio más cómodo para dos personas.
Para niños y adolescentes
En la mayoría de los casos, una cama de unos 80 o 90 x 200 cm es ideal para niños o adultos jóvenes. También hay camas para niños de 60 x 120 cm o 70 x 140 cm.
Para parejas y amantes del espacio extra
La mayoría de las parejas optan por un colchón de 160 o 180 x 200 cm. Esto garantiza que ambas personas tengan espacio suficiente para dormir cómodamente. Si uno de los miembros de la pareja se mueve más mientras duerme, puede ser necesario un colchón más grande, de 200 x 200 cm. Lo mismo ocurre cuando un niño o una mascota se meten en la cama. Para los que les gusta dormir cerca, una anchura de 140 cm puede ser suficiente.
Todos los tamaños figuran en la tabla siguiente.
Tallas habituales para solteros | 80 x 200 cm, 90 x 200 cm, 100 x 200 cm, 120 x 200 cm y 140 x 200 cm |
Tallas habituales para parejas | 140 x 200 cm, 160 x 200 cm, 180 x 200 cm y 200 x 200 cm |
El tamaño estándar de 140 x 200 cm es adecuado tanto para solteros como para parejas. Además, hay otros tamaños especiales, como con una anchura de 190 cm o una longitud de 210 cm, que también se pueden adquirir.
¿Uno o dos colchones?
Cuando se buscan camas para parejas con una anchura superior a 140 cm, puede ser beneficioso buscar dos colchones más pequeños separados en lugar de uno más grande. Esto permite a cada miembro de la pareja elegir el tipo de colchón que desea, así como su firmeza preferida. El inconveniente de este método es la grieta entre los dos colchones.
La princesa y el guisante: ¿qué altura debe tener mi colchón?
No sólo el tamaño, sino también la altura del colchón constituyen un criterio de compra importante. Aquí hay que distinguir entre la altura del relleno y la altura total. La altura del relleno debe estar entre 14 y 19 cm, mientras que la altura total debe estar entre 19 y 24 cm. Todo lo que supere los 25 cm puede considerarse de lujo. Los colchones infantiles, por su parte, no suelen superar los 10 cm de altura.
¿Suave como una nube o duro como una roca?
Hay colchones con distintos grados de firmeza. Esto lleva a los clientes a preguntarse «¿cuál es la firmeza correcta para mí?» La firmeza puede medirse por la densidad y la compresión del colchón.
Densidad
La densidad es especialmente importante en los colchones de espuma fría, pero también en los de espuma viscoelástica, látex y muelles. Medida en kilogramos por metro cúbico, la densidad indica cuánto material por unidad de volumen se ha utilizado en la producción del relleno. La regla general es: cuanto mayor sea la densidad, menos burbujas habrá en la espuma y mejor será la calidad del colchón. Esto conlleva un mayor peso, pero también una mayor vida útil del producto. Las personas más pesadas deberían comprar un colchón de mayor densidad. Mientras que los colchones baratos tienen una densidad máxima de 30 kg/m³, los modelos más caros pueden acercarse a los 50 kg/m³. En general, se acepta que un colchón debe tener al menos entre 35 y 40 kg/m³.
Compresión
Este valor mide la presión que debe ejercerse sobre un colchón para que se forme una hendidura. Este término se refiere a la capacidad de un colchón para volver a su forma original una vez que se ha ejercido presión sobre él. La medida establece que cuanto mayor es el nivel de compresión, más dura es la espuma. El nivel de compresión también influye mucho en la sensación del colchón. Los colchones blandos de espuma fría tienen una compresión de 30 kPa (el kilopascal es la unidad de medida de la dureza de la compresión). Los modelos más duros, por su parte, tienen una compresión superior a 40 kPa y pueden soportar hasta 120 kg de peso.
Clasificación
Determinar la firmeza adecuada para su colchón depende en gran medida de su propio peso corporal. Esta medición se vuelve compleja cuando también se tienen en cuenta la condición física, la edad y el tamaño corporal. El mayor problema es que no existen valores normalizados para todas las marcas. La mayoría de los fabricantes de colchones los anuncian por grados de firmeza, que van del H1 al H5.
Firmeza | Firmeza subjetiva | Peso corporal adecuado |
H1 | Suave | Hasta 60 kg |
H2 | Medio | Hasta 80 kg |
H3 | Duro | Más de 80 kg |
H4 | Extra duro | Más de 100 kg |
H5 | Ultra duro | Más de 120 kg |
A veces, los fabricantes sólo ofrecen tres grados diferentes de firmeza: «blando», para personas de hasta 60 kg, «medio», para personas de hasta 80 kg, y «duro», para personas que pesan más. Una regla general es que cuanto más joven seas, más duro debe ser el colchón que utilices, mientras que cuanto mayor seas, más blando. Por supuesto, las preferencias personales también influyen.
Un colchón, dos tipos de firmeza
Si una pareja comparte colchón, resulta más difícil encontrar una firmeza exacta que responda a las expectativas de ambos. Esto es menos problemático si ambos miembros de la pareja pesan más o menos lo mismo. De no ser así, se recomienda que la pareja opte por dos colchones individuales. Si el colchón es demasiado duro o demasiado blando para uno de los miembros de la pareja, puede provocar rápidamente dolores de espalda.
¿Qué más hay que tener en cuenta?
Además de la firmeza y el tamaño, hay otros criterios que deben tenerse en cuenta para que el colchón de sus sueños no se convierta en una pesadilla.
Como dormir entre algodones
El tacto de un colchón depende en gran medida de factores como la elasticidad del punto, la separación en zonas y el clima para dormir. Para dormir cómodamente hay que tener en cuenta dos aspectos principales: la capacidad de amoldarse a la forma del cuerpo y un apoyo eficaz. Además, es esencial para un buen clima de descanso que el colchón pueda hacer frente eficazmente a la humedad.
Elasticidad puntual
La elasticidad puntual se refiere a si un colchón cede directamente en el punto en el que se ejerce presión. Cuanto mayor es la elasticidad puntual, mejor se adapta uncolchón a las especificidades de un cuerpo determinado. Si un colchón es más ampliamente elástico, toda la superficie del colchón cede cuando se aplica presión en un lugar. La elasticidad puntual también depende de la densidad del colchón. Los modelos con una densidad de unos 35 kg/m³ tienen una elasticidad más amplia, mientras que los que tienen una densidad de entre 45 y 60 kg/m³ tienen una mejor elasticidad puntual. El material también desempeña un papel importante en esta categoría. El látex posee unas características especiales que contribuyen a elevar el punto de elasticidad, sobre todo en lo que se refiere al ajuste a la forma del cuerpo.
Colchones multizona
Hoy en día, muchos colchones (sobre todo los de espuma) se dividen en zonas de diferente firmeza. Estas zonas ofrecen distintos niveles de apoyo a diferentes partes del cuerpo, con el fin de crear un ambiente de descanso relajante, ergonómico y saludable. Estos colchones distribuyen el peso regulando dónde se hunde el cuerpo en el colchón, lo que ayuda a reducir la presión innecesaria. Las zonas más pesadas del cuerpo, como los hombros y las caderas, pueden hundirse más en el colchón, reduciendo la presión sobre la columna vertebral y creando una forma natural de doble S. Por lo tanto, crear diferentes zonas es esencial para crear las condiciones necesarias para un sueño reparador.
Se establece una diferencia entre:
- colchones de 3 zonas
- colchones de 5 zonas
- colchones de 7 zonas
- colchones de 9 zonas
los colchones de 7 zonas son los modelos más comunes del mercado. Esto se debe en gran parte al hecho de que este tipo de colchón se adapta al tamaño del cuerpo de aproximadamente el 90% de todos los adultos. Un colchón de 7 zonas tiene las siguientes características:
- 1. Zona: La zona de la cabeza es relativamente firme para proporcionar la cantidad correcta de apoyo y evitar que el cuello rote en exceso.
- 2. Zona: La zona más blanda del colchón se reserva para los hombros, lo que les permite hundirse en el colchón y liberar la presión sobre los músculos.
- 3. Zona: La zona lumbar permanece relativamente firme, manteniendo estable esta parte del cuerpo y liberando presión sobre la columna vertebral.
- 4. Zona: La zona alrededor de las caderas es de firmeza media, lo que permite hundir parcialmente las caderas en el colchón y enderezar la columna vertebral.
- 5. Zona: Al igual que la zona lumbar, la zona de los muslos es ligeramente más firme para mantener las piernas y el tronco en una posición estable.
- 6. Zona: La zona de las pantorrillas es especialmente suave, lo que permite un buen flujo sanguíneo.
- 7. Zona: La zona de los pies es comparable a la de la cabeza, ya que está fabricada con un material de firmeza media que sujeta los pies al tiempo que libera de presión las articulaciones y los ligamentos.
La altura también debe tenerse en cuenta en los colchones multizona. La separación en distintas zonas suele estar concebida para ser utilizada por adultos de entre 155 y 200 cm de estatura.
Clima para dormir
Los humanos perdemos una media de 500 ml de sudor por noche. Este líquido tiene que ir a alguna parte. Por esta razón, una buena circulación de aire es clave para permitir que el sudor se evapore y crear un clima confortable para dormir. La densidad del colchón sigue desempeñando un papel importante: cuanto mayor es la densidad, más lentamente se evapora la humedad. Las ranuras y ranuras de ventilación del colchón ayudan a optimizar la circulación del aire. Mantener un buen clima para dormir garantiza que el colchón se mantenga fresco, mientras que el moho y las bacterias tienen menos posibilidades de afianzarse.
Dormir de lado, boca abajo y boca arriba: las distintas posturas para dormir.
Dependiendo de sus hábitos personales de sueño, los distintos tipos de colchón ofrecen diferentes ventajas. Lo más importante es su posición preferida para dormir en combinación con su tipo de cuerpo:
Personas que duermen de lado
Alrededor del 60% de las personas duermen de lado. Aunque esta postura ayuda a liberar la presión sobre la columna vertebral, requiere un colchón perfectamente adaptado. Las caderas tienden a hundirse más en el colchón, mientras que las piernas, la cintura, el pecho y la cabeza requieren más apoyo. Los hombros también necesitan una superficie más blanda, para mantener recta la columna vertebral.
Consejo: los colchones fríos de 7 zonas son muy recomendables para las personas que duermen de lado, al igual que las versiones de látex y muelles ensacados.
Personas que duermen de espaldas
Alrededor del 18% de la población duerme boca arriba. En comparación con los que duermen de lado, las distintas partes del cuerpo no se hunden tanto en el colchón cuando se duerme boca arriba. Es importante que los hombros y el cuello estén bien colocados, mientras que el estómago y la zona lumbar deben poder hundirse en el colchón. Esto permite que la columna vertebral conserve su forma de doble S.
Consejo: Los que duermen de espaldas deberían plantearse comprar un colchón con al menos siete zonas diferentes. Se recomiendan especialmente los fabricados con espuma fría y látex natural.
Personas que duermen boca abajo
Los que duermen boca abajo constituyen el tipo más raro de durmientes, con sólo un 13%. Al igual que para los que duermen boca arriba, un colchón para los que duermen boca abajo debe ser elástico y proporcionar estabilidad para las caderas y la zona lumbar. Estas partes del cuerpo no deben hundirse en ningún caso más que los hombros, la cabeza y las piernas.
Consejo: Junto con los colchones de espuma fría con buena elasticidad puntual, también se recomiendan los colchones de látex y de muelles ensacados. Tenga en cuenta que la capa superior de acolchado no debe superar los 3 cm.
Somieres, cubiertas y mucho más
Tener el colchón perfecto está muy bien, pero no significa nada sin los extras adecuados. Además de tener un buen somier, también merece la pena plantearse comprar fundas, un topper para el colchón y el llamado «puente del amor».
El marco de listones
Una posición cómoda para dormir empieza ante todo por el somier. Para crear el entorno perfecto para dormir, todos los componentes de una cama deben combinarse a la perfección. El somier de láminas ayuda a proporcionar una posición cómoda para dormir al eliminar la presión del cuello, la espalda, las rodillas y los discos intervertebrales. Lo hacen principalmente proporcionando suspensión debajo de un colchón. Al mismo tiempo, el somier de láminas garantiza la estabilidad del colchón y la circulación del aire.
Hay tres tipos principales de somier entre los que elegir:
- Somierenrollable: es la forma más sencilla de somier. Las lamas individuales están unidas entre sí por algún tipo de cuerda y pueden desplegarse bajo la cama como una escalera. Sin embargo, con estos modelos no es posible ajustar ninguna de las lamas individualmente.
- Somier de láminas: en estos modelos, las láminas de plástico ajustables se montan sobre las láminas, normalmente en filas de cinco o seis. A diferencia de los somieres enrollables, las placas individuales pueden ajustarse a la posición de descanso deseada por el usuario.
- Somier eléctrico: estos somieres pueden accionarse a distancia y son adecuados para cualquier persona que priorice la comodidad. Tanto la zona de las piernas como la de la cabeza pueden ajustarse con sólo pulsar un botón para que la posición para dormir sea lo más cómoda posible.
Bien arropados: fundas de colchón
Las fundas de colchón se diferencian entre sí por sus materiales, su revestimiento y su relleno. En el mejor de los casos, las fundas de colchón son desenfundables, lavables y vienen con cremallera. Esto permite a los usuarios retirar la tapa para lavarla independientemente del relleno.
El material
La lana tiene el inconveniente de que puede desgastarse si se la somete a un esfuerzo excesivo, por ejemplo, un durmiente inquieto. Por eso, los fabricantes mezclan la lana con fibras elásticas como el poliéster y la poliamida. Las personas que sudan mucho por la noche deberían optar por una funda de viscosa ligera. Otras opciones son el modal, el lyocell y el tencel. Losalérgicos deben elegir materiales no reactivos como el poliéster y la poliamida.
La carcasa
Existen tres tipos principales de fundas de colchón:
- Taladro: es el tipo más común para las fundas de colchón. Está fabricado con un tejido tupido y confiere a la cama un aspecto aerodinámico.
- Terciopelo: este tipo de funda sedosa tiene una superficie seca y duradera, pero tiende a resbalar sobre el colchón.
- Toalla: la toalla es adherente y elástica, pero algunos la consideran un poco incómoda.
- Jersey: las fundas de jersey son transpirables y elásticas. En su mayoría son de doble capa.
El relleno
Los colchones de alta calidad no están formados simplemente por una sola capa de material, sino que están rellenos de una capa de vellón. El forro polar de poliéster es el más adecuado, ya que puede lavarse en lavadora a 40 °C. Cuanto más grueso sea el vellón, mayor será la calidad de la funda. El relleno se mide en gramos por m². Los rellenos de lana tienen un grosor de 500 g por m², mientras que el vellón de poliéster es de 200 g por m². Se recomienda un relleno de 400 g por m².
Más comodidad: un topper para el colchón
Para mayor comodidad, se puede colocar un topper sobre el colchón y fijarlo en las esquinas. Este revestimiento protege el colchón y evita que el polvo y el sudor causen problemas de higiene. Los topper de colchón también sirven para suavizar un colchón duro. Los topper no deben confundirse con los protectores de colchón, que se colocan debajo del colchón para protegerlo de los daños causados por el somier.
¿Te estorba el hueco del colchón mientras te acurrucas? ¡Consigue un puente del amor!
Un puente del amor ayuda a evitar que la pareja se despierte en la grieta entre los colchones o pierda pertenencias en la hendidura. Estos inventos mejoran las condiciones de sueño asegurándose de que nada se interponga entre una pareja que quiere acurrucarse. La mayoría son de espuma fría y tienen forma de T ancha. Como su nombre indica, sirven de puente entre dos colchones.
El mantenimiento correcto
Para que su colchón se mantenga en perfecto estado y libre de bacterias, puede tomar algunas medidas. Para proteger la funda del colchón del sudor y el polvo, se recomienda utilizar una funda de colchón ajustable. Debe lavarse a 50 °C cada dos semanas. La mayoría de los colchones vienen con una funda extraíble y lavable. Aunque el uso de una funda de colchón ayuda a evitar la necesidad de lavarlo alguna vez. Los usuarios deben evitar aspirar la superficie del colchón, ya que esto puede dañar la estructura de la superficie.
Para evitar que un colchón se desgaste, lo ideal es voltearlo y girarlo mensualmente. Este proceso también ayuda a airear el colchón, así como a dejar escapar el aire atrapado y evitar la acumulación de olores, humedad y moho. Para evitar el moho causado por la humedad atrapada, los usuarios deben recordar airear completamente sus colchones de vez en cuando. Los modelos más pequeños y ligeros son mejores para esto, ya que pueden voltearse con mucha más facilidad.
Incluso los colchones más caros y mejor mantenidos deben cambiarse cada 10 o 15 años. Esto se debe principalmente a razones de higiene, ya que los residuos de sudor y la suciedad pueden acumularse con el paso de los años. Si el colchón no se cuida con esmero o el dormitorio es especialmente húmedo, la vida útil del colchón se acorta en consecuencia. En el momento en que han aparecido bultos, ha llegado el momento de buscar un nuevo modelo. La causa de este problema podría ser un espacio demasiado grande entre las lamas inferiores (más de 4 cm). La temperatura ambiente ideal para un colchón oscila entre 16 °C y 20 °C. La humedad ideal es de aproximadamente el 50%.
Consejos para reciclar un colchón
Cuando un colchón viejo se acerca al final de su vida útil, hay que encontrar uno nuevo. Pero, ¿cómo deshacerse correctamente de un colchón viejo? Aquí hay varias posibilidades:
Los colchones pueden desecharse en un centro de reciclaje, donde serán descompuestos y reciclados en sus partes constituyentes.
Normalmente se pueden donar colchones. Si aún están en buen estado, ponte en contacto con refugios y organizaciones benéficas locales para ver si tienen uso para ellos.
Algunos vendedores ofrecen la posibilidad de deshacerse de un colchón viejo al mismo tiempo que se entrega uno nuevo.
Algunos ayuntamientos disponen de servicios de recogida de colchones, pero no en todos. Llevar el colchón a la punta siempre es una opción.
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